La mal llamada ley de plásticos de un solo uso
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Señor Director:
Como ACHIGA compartimos la preocupación respecto a la mal llamada ley de plásticos de un solo uso, expuestas en las cartas de Christian Arriagada y Juan Pablo Andreani.
Esta ley no solo prohíbe el uso de plásticos para el consumo dentro de locales, sino que abarca todos los materiales de un solo uso, incluso alternativas innovadoras como vasos de algas, polímeros auto compostables, y cadenas de reciclaje inteligentes a cargo de los locales, afectando diversas iniciativas de reciclaje y compostaje que se vienen promoviendo en Chile.
Un aspecto clave que no fue considerado en absoluto por el legislador, es que la obligación de usar utensilios reutilizables tendrá un gran impacto en el consumo de agua. Por esto, salvo el caso de Francia, a nivel mundial la tendencia es no adoptar este tipo de prohibiciones.
Esta despreocupación por el agua se contrapone al reciente fallo que revocó el permiso ambiental del Data Center de Google, precisamente por no haber evaluado su impacto hídrico, exigiendo considerar en la evaluación la compleja crisis hídrica chilena.
Un lavavajillas eficiente consume cerca de 200.000 litros de agua al mes, lo que multiplicado por los cerca de 3.000 locales que en Chile utilizan productos de un solo uso, evidencia que la implementación de la ley, que exige lavar todo dentro del local, afectará nuestra crisis hídrica.
Nos parece esencial que se permita a los restaurantes usar productos de un solo uso compostables o reciclabes. No es aceptable que en Chile el impacto por el uso del agua sea relevante para rechazar algunos proyectos, y que sea obviado en otras materias, solo por parecer ser amigables con el medio ambiente.
Máximo Picallo
Presidente de Achiga
